El Santo
Padre lanzó esta invitación en el mensaje enviado a los obispos y laicos de la
región andina de América —Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela—, que
participaron en un encuentro organizado en Bogotá, del 21 al 24 de noviembre,
por la Pontifica Comisión para América Latina y el Consejo Latinoamericano de Laicos.
En la
misiva, con fecha 11 de noviembre, el Santo Padre señala que se necesitan
“personas constructoras de puentes de fraternidad, capaces de introducir la
novedad de un ‘estilo samaritano’ de hacer política”.
“La
liberación que el corazón espera y que Jesús anuncia no se construye con
extremismos, con mesianismos, con descalificaciones sumarias o insultos. Mucho
menos con agresiones y encono”, indica el Pontífice.
“Sólo
encontraremos caminos nuevos para nuestros pueblos —asegura— a partir de corazones
dispuestos a hacer hasta lo imposible por dialogar con respeto, por aprender
del otro (aún del adversario), por hacer de la vida política un ejercicio de
amistad social en la que todos podamos reconocernos hermanos”.
En la carta,
compartida en el sitio web del Celam, el Papa Francisco también recuerda
que “los espacios de poder no son lo más relevante. Lo decisivo es suscitar
procesos que humanicen nuestra convivencia y maduren nuestra cohesión social
construyendo fraternidad”.
En esto,
señala, “la contribución de la Iglesia es insustituible. Quienes seguimos a
Jesús, sabemos que nuestra misión no es el mero activismo, sino la proclamación
alegre de una buena noticia que anuncia que la mayor amistad reside en ‘dar la
vida por los amigos’ y en amar a los adversarios”.
“Este ‘dar
la vida’, este ‘amar’, en ocasiones implica sacrificios extraordinarios, como
los de nuestros mártires y, en otros momentos, actos silenciosos de perdón, que
también son entrega y testimonio. Esto lo hizo Jesús y nosotros no podemos más
que seguir su camino tanto en la vida privada como pública”, indica.
América
Latina es una síntesis mestiza
En otra
parte de su carta, el Papa Francisco comparte su reflexión sobre el pasado y el
presente de América Latina.
El Pontífice
argentino afirma que el continente “es una región rica en historia y cultura,
de honda religiosidad y con bellas experiencias de fraternidad. Nuestra ‘forma
de ser’ como latinoamericanos es una síntesis mestiza que integra y reconcilia
elementos de las culturas prehispánicas y de diversas tradiciones europeas”.
“Esta
síntesis en ocasiones se realizó con violencia y en muchas otras con
fraternidad. La historia de nuestros pueblos, como toda realidad humana,
muestra las heridas fruto del pecado y también los efectos de la redención”,
explica.
En su
misiva, el Santo Padre añade que “el mestizaje latinoamericano en algunas
partes es étnico y en muchas partes de la región, cultural. Esta síntesis es
mucho más que la ‘suma de las partes’”.
“Aún en la
actualidad, en la existen potentes corrientes culturales procedentes de todas
partes del mundo que influyen en América Latina, es posible detectar una
originalidad que nos hermana y nos distingue de otras comunidades”.
“Por
supuesto —explica—, la identidad latinoamericana no es una ‘esencia’
inamovible. Como toda realidad cultural es algo dinámico que hoy requiere
también de la creatividad y de los aportes de nuestra generación”.
En su carta,
el Papa Francisco ha agradecido al Celam por haber acogido en su sede el
encuentro promovido por la Pontificia Comisión para América Latina, el cual se “realiza
periódicamente con el fin de animar el protagonismo de los fieles laicos y de
los pastores ante las situaciones sociales y políticas de nuestro tiempo”.
Fuente: ACI Prensa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario